TARTA SACHER

Esta es la tarta que hice para mí 31 cumpleaños, la verdad venían mis amigas a tomar café a mi casa y como dicen ellas me tenia que inspirar, ya que dicen que soy la cocinitas, no les podía defraudar, así que buscando alguna tarta especial vi la Tarta Sacher que mejor tarta de chocolate para un cumpleaños y para los chocolateros, la verdad cumplí con mi promesa les hice la tarta y la verdad que fue un grandísimo éxito.

Esta receta la cogí de un blog que sigo muy a menudo Mercado Calabajío, la verdad té explica el paso a paso muy bien y es difícil que no te salga.

INGREDIENTES:

60 gr almendra

50 gr harina

50 gr azúcar glas

50 gr harina normal

50 gr mantequilla

3 huevos

75 gr chocolate fondant lindt al 70% (postres culinaria)

5 gr levadura química royal

Una pizca de sal

1 cucharadita de azúcar vainillada

Mermelada de fresa

Para la cobertura de chocolate

200 gr chocolate fondant lindt 70% (postres culinaria)

200 ml nata para montar

25 gr mantequilla

PREPARACIÓN:

Vamos a empezar con el bizcocho, ponemos a deshacer el chocolate al baño maria, echamos una cucharada de agua para que sea más fácil, por otra parte se ponen a dorar las almendras en el horno a 150º hasta que estén un poco doradas, tened cuidado porque como se tuesten mucho puede amargar, una vez tostadas se dejan enfriar y molemos en una picadora hasta que se haga polvo, reservamos, ahora mezclamos el azúcar glass con la mantequilla a temperatura ambiente con la varilla, añadimos el chocolate y seguimos mezclando, añadimos una a una sin dejar de batir las yemas de los huevos, las claras las reservamos.

Mientras tanto mezclamos las claras ya montadas el azúcar poco a poco para que no se bajen y seguimos batiendo unos 2 minutos más.

En la mezcla del chocolate añadimos la cuchara de azúcar vainillada y las almendras molidas, mezclamos y añadimos las claras y vamos meneando con una lengua despacio y con movimientos envolventes de abajo a arriba, no lo hagáis con la batidora si no se bajan las claras y el bizcocho ya no quedara tan esponjoso.

Mezclamos la levadura y la sal con la harina y tamizamos, lo añadimos a la mezcla del chocolate y seguimos mezclando con cuidado con la lengua, reservamos y vamos con el molde, tiene que ser desmontable,  lo untamos con mantequilla y espolvoreamos cacao en polvo para que no se pegue el bizcocho a la hora de desmoldar.

Echamos la masa del bizcocho y horneamos a 180º, el horno ya precalentado lo dejamos 45 minutos, a los 45 minutos lo pinchamos con un palillo de pinchos, si sale limpio es que esta listo, pero si sale húmedo de la masa se tiene que dejar unos minutos más, hasta que nos salga limpio, lo dejamos enfriar y una vez frío lo desmoldamos y le damos la vuelta para que quede mejor y más firme para la hora de cubrirlo con el chocolate.

Partimos el bizcocho por la mitad, yo utilice un cortador de bizcochos, pero si no tenéis con cuidado con un cuchillo bien afilado y untamos con la mermelada de fresa, se vuelve a poner la otra capa de bizcocho y vamos a preparar la cobertura.

Empezamos a preparar el ganaché de chocolate (o la cobertura), ponemos la nata a hervir y una vez hirviendo retiramos del fuego y añadimos el chocolate troceado y lo removemos con unas varillas hasta que se funda, una vez fundido añadimos la mantequilla a temperatura ambiente y seguimos removiendo.

Ponemos el bizcocho en un plato y vamos cubriendo por todo el bizcocho con el ganaché (reservamos un poco en una manga pastelera con la boquilla para escribir), lo dejamos un poco en la nevera que enfrié y cuando este frío lo sacamos y ponemos con la manga el nombre de la tarta Sacher, lo metemos otra vez para que cuaje las letras y ya podemos probar este dulce bocado.